Chile: Servicios de cuidado y división de responsabilidades de cuidado dentro del hogar

Hace ya un par de años estamos enfrentadas a grandes cambios mundiales que vienen a reconfigurar el globo, pero especialmente la manera como se gestan los intercambios. Sin duda, como toda actividad social los intercambios comerciales tienen además su componente social, tanto en su conformación como en sus resultados. De manera sintética se podría decir que las transformaciones económicas y en el comercio tienen “efectos” sobre las sociedades donde estas se llevan a cabo.

Muchas de estas consecuencias son buscadas e incluso anheladas por quienes impulsan y provocan parte de estos movimientos, otras sin embargo, se verán expresadas fuera de las consideraciones y planificaciones iniciales, o por lo menos, fuera de los intereses inmediatos.

En este contexto podemos insertar la invisibilidad de las consideraciones de género, cuando analizamos los resultados de las iniciativas comerciales que se han llevado a cabo en el último tiempo. Tanto el trabajo femenino remunerado, como la llamada economía del cuidado se encuentran completamente ausentes de este debate, y por lo tanto en desamparo para confrontar sus resultados.

Durante la década de los noventa, se produce una serie de iniciativas y políticas públicas destinadas a fomento el sector exportador, estos impulsos dan sus resultados y crean una serie de escenarios de producción que requieren nueva mano de obra. Cómo ha sido tendencia en las últimas décadas, este proceso lleva aparejado un incremento de la participación de las mujeres en estas áreas exportadoras. En Chile, especialmente centrada en la agroindustria, como nueva fuente de trabajo para quienes se encuentran en sectores rurales o pequeñas ciudades cercanas.

Estos cambios exigen a su vez, a la política pública, reinventarse para satisfacer los requerimientos que supone esta nueva actora en terrenos antes limitados. No obstante, estas adecuaciones de política han sido hasta e momento básicamente reactivas y distan mucho de considerar todas las aristas que esta revolución masiva de los roles tradicionalmente adquiridos requiere.

Pese a que lo constatan, el estado, las empresas y la sociedad en general, no dan cuenta y algunas veces, se hacen cargo lentamente, de lo que significa que las tareas tradicionalmente asociadas al género femenino, no dejan de ser responsabilidad de las mismas mujeres que ahora se desempeñan como proveedoras remuneradas, y las consecuencias de esta sobrecarga laboral, es parte de los debates que es necesario instalar.

Dentro de este escenario, este proyecto busca abordar las transformaciones e incidencias de género que ha provocado la liberalización del comercio, tanto en los ámbitos laborales remunerados como dentro del trabajo no remunerado.

Para esto, el foco de la investigación se centrará en los años noventa, década en que, como ya fue señalado, se produjeron una serie de cambios en los modelos exportadores de Latinoamérica, y en Chile un crecimiento importante de las exportaciones sumado a un gran énfasis en tratados de libre comercio que potencian fundamentalmente estos sectores.

Parte importante del objetivo del proyecto está situado en la necesidad de ver las relaciones entre los cambios en la economía, especialmente el sector exportador y los cambios acaecidos en los sistemas de cuidado. Ver la manera en que la política pública se ha hecho cargo de los fenómenos que se han venido desarrollando durante la década, a propósito del énfasis en el comercio exterior.

En este sentido, en una primera etapa, el proyecto buscó recopilar información acerca de los cambios que se han producido en materia de la economía del cuidado, con el objetivo de recrear las diversas iniciativas que se han dado en ese ámbito. Todas, con miras a cubrir las necesidades de un creciente número de mujeres que se enfrenta al trabajo remunerado, en las ciudades y sectores rurales de Chile.

El énfasis en la ruralidad, se debe a que en este caso el lugar donde se llevan a cabo las políticas es particularmente importante para determinar las posibles incidencias de la liberación económica sobre la economía de cuidado. En el caso chileno el desarrollo de las exportaciones se encuentra concentrado en zonas alejadas de las grandes ciudades. Los sectores de mayor crecimiento en que la presencia de mujeres en el trabajo es importante, son los sectores agrícolas y de pesca.

Sin embargo, los alcances de la investigación son limitados, en primer lugar dado la información disponible. Las posibilidades de acceder a datos que reflejen directamente la incidencia de las exportaciones en los servicios públicos y privados de cuidado es, hasta el momento algo prácticamente imposible de conseguir, en la mayoría de los casos y sólo con la excepción de programas específicos, las cifras tienden a ser generales, y las conclusiones sólo pueden llegar a ser aproximaciones de la realidad, a partir de criterios regionales o de ruralidad. En segundo término, este primer intento de recabo de información sólo tiene por objetivo contextualizar y dar a conocer las características de los sistemas de cuidado del país, ya que se espera en una segunda etapa y a través de un estudio de caso, mostrar más claramente las transformaciones específicas del sector.

Es así, que se presenta en la primera parte de este documento, una revisión de las características de los servicios de cuidado infantil y su evolución durante los años noventa. Este registro parte presentando la forma que ha adoptado la normativa legal en el último tiempo, y cómo esta se configura en torno a las necesidades de la población.

En el punto 2 se presenta un panorama general de los servicios de cuidado infantil en Chile, durante el período especificado. Los puntos 3 y 4, entregan detalladamente el desarrollo de los servicios de cuidado y educación, dedicados a las poblaciones de 0 a 5 años y de 6 a 13 años, respectivamente. La cobertura en salud para estos mismos grupos etáreos, se presenta en el apartado 5, entregando una breve explicación de cómo funcionan los sistemas de salud en Chile. Finalmente en el punto 6, se entregan todos los otros tipos de prestaciones sociales o monetarias, enfocadas al cuidado de este sector de la población.

La segunda parte del documento está dedicada a las políticas de cuidado enfocadas hacia la ancianidad. En este caso, en el primer punto se revisan las políticas de protección y cuidado dirigidas a este sector. El segundo apartado presenta el levantamiento de la cobertura de los servicios entregados tanto por el sector público como privado. En el punto tres se entregan los datos existentes acerca de la cobertura de hogares y residencias destinadas a la tercera edad. Y finalmente el punto 4 nos muestra el volumen y las características, de los programas públicos destinados al adulto mayor.

En la tercera parte del documento, se revisa el soporte que existe para el cuidado de otras personas dependientes. En el primer punto el foco está puesto en la legislación que configura los derechos de esta población. En el segundo punto se exploran las posibilidades de la cobertura actual de cuidado con la que cuentan quienes son consideradas dentro de este grupo.

La cuarta y última parte del documento está por completo destinada al análisis de algunos de los resultados que ha obtenido estudios acerca de la división de las responsabilidades dentro del hogar. Dada las diferencias metodológicas de los trabajos revisados y a la poca recurrencia de ellos, es imposible extraer tendencias para la década, por lo que su papel se convierte más bien en entregar una radiografía de cómo se perfila y se continúan configurando los roles de mujeres y varones dentro de la familia.

Año: 2007
Autoras: Nora Reyes, Claudia Paz, Rosalba Todaro
Publicado por: Capítulo Latinoamericano de la Red Internacional de Género y Comercio

CHILE: SERVICIOS DE CUIDADO Y DIVISIÓN DE RESPONSABILIDADES DE CUIDADO DENTRO DEL HOGAR